Prevención de la dependencia
Dentro de las acciones para prevenir la dependencia, es de vital importancia poner en práctica una serie de estrategias bio-psico-sociales que permitan a las personas mayores optimizar al máximo sus capacidades y en consecuencia prolongar lo más posible su autonomía personal.
Desde el punto de vista cognitivo no hay un momento concreto para el deterioro, éste depende de muchos factores y, según los expertos, a mayor actividad intelectual el deterioro cognitivo tiende a no aparecer. Debido a que el cerebro está diseñado para aprender y para modificarse en función del aprendizaje, la estimulación de la musculatura cerebral por actos externos como la actividad intelectual que supone un aprendizaje permanente ofrecido y posibilitado por los cursos universitarios para mayores, optimizan al máximo las capacidades de las personas mayores; es como decir que la Universidad es el gimnasio del cerebro.
Los cursos universitarios para mayores potencian el mantenimiento de las capacidades sensoriales, físicas, cognitivas, sociales y afectivas, mantienen y mejoran la capacidad de observación, concentración y percepción del aprendizaje; optimizan las funciones cognitivas; positivan la percepción del mayor desde la propia familia y mejoran las relaciones interpersonales; en consecuencia, el envejecimiento activo y participativo de los PUMs no solo promueve la autonomía personal, la mantiene el máximo tiempo posible.
Impulsar las actividades de los programas universitarios de mayores, es potenciar el empoderamiento de las personas mayores, reconociendo los derechos humanos de las personas mayores de independencia, dignidad, cuidado, autorrealización y participación en los ámbitos económicos, sociales, culturales y en los procesos de adopción de decisiones a todos los niveles; incrementan las capacidades del colectivo, rompen los paradigmas negativos, favorecen un clima apropiado de estímulos para el desarrollo de la autonomía personal, colaborando firmemente en la autorrealización hacia el conocimiento de uno mismo para alcanzar la felicidad. El compromiso de una oferta ajustada a las demandas de los mayores implica el reto de poner los medios y adoptar las medidas necesarias para un envejecimiento positivo, que es lo mismo que decir: prevenir la dependencia.
Junio de 2017