El recinto amurallado se construyó en 1656, previo pago de 200.000 ducados por parte del Rey Felipe IV y 2000, de los vigueses, cantidad que llegaron a reunir con el propósito de construir el baluarte de A Laxe. La fortificación era una sucesión de baluartes y puertas, con dos baterías situadas en la actual Teófilo Llorente.