Resiliencia, rubí, roca, risa, remanso y raíz
Cuando me propuse la idea de escribir este juego de palabras me sentí muy atraída durante este tiempo que estuvimos confinados. Es una serie de relatos con todas las palabras del abecedario, que yo solía pedir a mis amigos o familiares. En este caso fue mi hermana Elvira la que me dio cinco palabras que empezaban por la letra que le correspondía en ese momento, a continuación, yo le confeccionaba un relato uniendo todas las palabras entre sí. En este caso fue la Letra “R” con estas cinco palabras que ella me envió yo realice esta pequeña composición, que espero haya sido de su agrado y el de todos vosotros, aunque las palabras se las traían…
Resiliencia, rubí, roca, risa, remanso y raíz
Guisamo, pueblo en la provincia de A Coruña, se encuentra en el municipio de Bergondo, lugar de veraneo y al mismo tiempo importante reserva genética de manzanas de España. Cuenta hoy día más o menos con 13 variedades entre dulces y acidas; adentrémonos al relato
Las familias que se acercan a este lugar en verano buscan un REMANSO de paz, después de un duro invierno casi siempre lloviendo, con esa lluvia como allí la llaman orvallando.
Durante nuestros años de infancia, allí, jugábamos con niños de la zona acostumbrados a otra forma de vida, ya que sus casas son distintas a las de la ciudad, con patios llenos de animalejos, con sus gallinas, conejos e incluso vacas donde por la mañana veíamos cómo las ordeñaban y nos traían la leche a casa, pero a nosotras aquello nos partía de RISA porque no estábamos acostumbradas a todos aquellos menesteres de la campiña coruñesa, incluyendo aquella variedad de manzanas que solíamos coger de los árboles.
Un día por la mañana, decidimos salir hacia la playa de Pontedeume, playa de entorno rural de arena blanca y fina, resguardada de los vientos, con aguas tranquilas y blanquecinas sin peligro, pero muy frías. Aquella playa tenía una palmera justo en el medio de la arena con su RAÍZ al aire, que, por cierto, nos llamaba mucho la atención porque no era común ver una palmera que estuviera en medio de la playa, y estuvimos toda la mañana jugando a su alrededor y saltando de ROCA en roca. Pasamos esa mañana bañándonos en aquellas aguas tan frías y gélidas hasta la hora del almuerzo.
Almorzamos en su pinar, que es de una belleza poco frecuente, unos bocadillos riquísimos que nos había preparado la tata Rosario. En ello estábamos cuando vimos relucir una pequeña piedra y cuál fue nuestra sorpresa al ver brillar sobre el polen caído de los pinos nos preguntamos ¿qué es eso? Es un RUBÍ, dijo una niña, todos los niños quedamos sorprendidos, y preguntamos ¿Qué es eso? suelen ser piedras preciosas, no sabíamos qué hacer con aquello. Nos preguntábamos unos a otros ¿qué hacemos con esto?, veíamos que era una piedra preciosa, pero no alcanzábamos a saber el valor que aquella piedra roja brillante allí caída, pero si sabíamos que era importante.
De repente apareció una señora muy viejita y al mismo tiempo muy elegante con un bastón, se veía que tenía mal talante y la encontramos con mucha RESILIENCIA, y nos dice ¿Qué habéis encontrado, chiquillos? Una niña contestó “esta piedra, la viejecita nos dijo: “esta piedra es mía, me la regalo mi amor antes de morir”. Al oír estas palabras, todos nos quedamos en silencio y nos dimos cuenta cuál era el motivo de su malestar, entonces le entregamos la piedra y le dijimos: “Señora, aquí la tiene, pero cuídese mucho de esta pandemia, que hace mucho mal a las personas mayores” … y estamos pasando momentos muy difíciles.
¡Siempre debes darte a respetar!
Sabias que la humildad abre las puertas,
y la prepotencia las cierra.
Remedios Seijo
Socia de Auctemcol
Universidad UC3M – de Colmenarejo





























































