CRECER HACIENDO CRECER
En su último libro, el profesor Xavier Marcet afirma que son verdaderamente estimables las empresas que “crecen haciendo crecer a los demás”. Si esto es válido para las empresas aún lo es más en el ámbito personal, y qué mejor instrumento para ese crecimiento que la cultura. Por eso es tan importante garantizar el acceso universal a la cultura y a los bienes culturales, un acceso que no es sólo físico (acceder a museos, a salas de conciertos, bibliotecas, etc.) sino que demanda a menudo la decodificación de unos lenguajes artísticos que erigen una barrera entre la ciudadanía y la obra artística y para eso necesitamos de alguien que nos ayude a comprender, a descifrar lo que estamos viendo, leyendo o escuchando. Todos, todas, necesitamos nuestros particulares guías para adentrarnos en la extremadamente rica y compleja realidad cultural que nos ha tocado vivir.
Valga esta reflexión inicial para situar el tema que nos ocupa: cómo las persones mayores pueden sentirse más incluidos en el sistema cultural y aumentar su participación más allá de los canales que las comunidades autónomas y los gobiernos locales ya ponen a disposición de la ciudadanía: clubes de lectura, precios reducidos en las entradas, representaciones especiales, etc. La respuesta está en acciones que se traduzcan en una militancia cultural activa, es decir, personas que además de gozar de los bienes culturales sean capaces de acercarlos a los colectivos y a las personas que tienen dificultad o poca predisposición para ese disfrute.
La cultura de proximidad no consiste sólo en programar conciertos en los centros cívicos sino también en dar las claves para saber disfrutar de esos conciertos. La cultura de proximidad también es el familiar que te ayuda a amar la música clásica, la amiga que te introduce en la danza contemporánea, el maestro que te incita a ir al teatro o al cine… Y en esa red de cultura de proximidad las personas mayores pueden jugar un papel muy importante por la experiencia acumulada, por lo aprendido a lo largo de la vida y porque conocen de primera mano la importancia de continuar aprendiendo y educándose.
Como decía al principio, ese crecimiento se producirá en la medida en que seamos capaces de hacer crecer a los demás, en que seamos capaces de incentivar, de motivar, de ayudar a otras personas a incrementar esa red cultural de proximidad donde, a la vez, seremos incentivados a introducirnos en campos culturales a los que difícilmente accederíamos por nuestro propio pie.
Miquel Iceta i Lloréns
Ministro de Cultura y Deporte
Marzo, 2022