La IA ¿Por qué nos asusta la Inteligencia Artificial?
En las reuniones y debates dentro del colectivo de personas mayores, últimamente siempre sale el tema de la IA (Inteligencia Artificial), algo sobre lo que, solamente los expertos, pueden dar explicaciones para que podamos entender el efecto y la magnitud de su aplicación en todos los niveles del desarrollo vital del ser humano.
La IA es la combinación de algoritmos planteados con el propósito de crear máquinas que presenten las mismas capacidades que el ser humano.
En lo referente a la salud la IA aporta nuevas oportunidades para mejorar la atención médica y la investigación biomédica. Un gran enfoque de la IA en el sector de salud es en los sistemas de apoyo a la decisión clínica, los cuales utilizan observaciones de la salud y conocimiento de casos para ayudar con las decisiones de tratamiento. La capacidad de la IA para interpretar los resultados de las imágenes puede ayudar a detectar un cambio minúsculo en una imagen que un clínico podría omitir por accidente y los dispositivos portátiles permiten el monitoreo constante de un paciente y la detección de cambios fisiológicos que pueden proporcionar señales de alerta temprana de un evento peligroso.
La IA se aplica también para proporcionar ropa inteligente que pueda detectar condiciones inseguras e intervenir para proteger la salud, con las consecuencias tan positivas como la prevención, la reducción de costes relacionados con los gastos de atención médica y el trabajo perdido.
La cantidad de datos que se genera, tanto por parte de los humanos como por parte de las máquinas, supera en gran medida la capacidad que tienen las personas de absorber, interpretar y tomar decisiones complejas basadas en esos datos. La IA supone la base de todo el aprendizaje automático y el futuro de todos los procesos complejos de toma de decisiones. Los ordenadores son extremadamente eficientes a la hora de calcular combinaciones y permutaciones para llegar a la mejor decisión. La IA (y su evolución lógica del aprendizaje automático) y el aprendizaje profundo constituyen los cimientos del futuro en la toma de decisiones en todos los ámbitos de la vida.
El ser humano tiene el control sobre la IA para mejorar las condiciones de vida, pero siempre hay el riesgo de su utilización para acciones destructivas, perversas y/o en beneficio de una minoría.
La legislación sobre la IA va mucho más lenta que los nuevos retos a los que nos enfrenta. El conflicto generado por la aplicación de la IA en las obras/guiones para películas, series, etc. en Hollywood, ha llevado a los autores intelectuales de los guiones a una huelga que ha servido para comenzar, de una manera visible, a controlar la utilización de la IA. * Los guionistas pueden usar la inteligencia artificial como una herramienta, pero nada más que eso: nunca se le podrá reconocer la autoría y los profesionales no podrán escribir obras íntegramente con ella (o basándose en sus creaciones como fuente principal). Además, si una productora ofrece materiales como base de trabajo y los ha creado con IA, también debe indicarlo.
Nos asusta el gran potencial de la IA para intervenir/modificar nuestro modo de vida, pero está en manos de TODOS utilizar la IA para la toma de decisiones sensatas. La IA debe ser segura, transparente, trazable y no discriminatoria.
*El Confidencial 30.09.2023
Septiembre, 2023